La apertura del nuevo taller de pintura marca un nuevo hito Porsche, en la modernización de su ubicación tradicional de Zuffenhausen. La innovadora planta, organizada en base a líneas ecológicas, fue encargada oficialmente hoy en presencia del Ministro Presidente de Baden-Württemberg, Winfried Kretschmann, el Alcalde de Stuttgart, el Dr. Wolfgang Schuster, el Presidente del Consejo de Supervisión, el Dr. Wolfgang Porsche, acompañados por numerosos invitados.

La nueva área del taller, que se finalizó a tiempo para que coincida con el inicio de la producción del nuevo Porsche 911, es donde se pintan las carrocerías por dentro y por fuera según el color deseado, mediante el uso de tecnología de vanguardia. Esto ocurre en un ambiente completamente libre de polvo, gracias a que la planta está totalmente cerrada. Al mismo tiempo, un nuevo sistema de remoción de gotas de pintura electrostático y una planta purificadora de aire de escape de químicos húmedos reducen al mínimo las emisiones de solventes y partículas.

Esto significa que Porsche puede prescindir del tubo recolector de aire de escape de pintura de 60 metros de altura que de otra manera era obligatorio en el nuevo edificio. Es más, la operación altamente eficiente, con una recirculación de aire del 70%, hace que el consumo de energía sea especialmente económico. La tecnología ecológica permite que Porsche no alcance los límites legales por órdenes de magnitud.

"El nuevo taller de pintura es típico de Porsche: como a menudo es el caso, estamos ampliando las fronteras de los límites tecnológicos anteriormente vigentes, estamos siempre a la vanguardia y somos pioneros en los inventos que posteriormente sirven para un bien común", dijo Matthias Müller, Presidente del Consejo de Dirección de Porsche AG. Pero, al mismo tiempo, recordó el desafío que conlleva la operación y el mantenimiento de una industria sostenible a largo plazo en una zona densamente poblada como Zuffenhausen: "Lo que Porsche está haciendo aquí es conciliar la economía con la ecología, creando puestos de trabajos de vanguardia para expertos especialistas y, por lo tanto, apoyando esta ubicación mundialmente famosa a largo plazo".

El edificio del taller de pintura de 192 metros de largo y 52 metros de ancho es donde las carrocerías de las líneas de modelos del Porsche 911 y el Boxster Cayman reciben la protección anticorrosiva, son pintados y sellados superficialmente en un proceso de varias etapas. Esto se realiza precisamente en sincronización con el proceso de producción de autos deportivos completo. La planta hace aun más eficiente, aumenta la flexibilidad del fabricante de autos de primera categoría y afirma el logro de los altos estándares de calidad que la compañía establece para sí.